Eco hace troje

José Luis Arroyo-Robles

x piedra ediciones, 2024

Alrededor del mundo se pueden hallar formas únicas de construir hogares y refugios, donde lxs habitantes han hecho uso de lo que su entorno les ofrece; tierra, piedras, madera, e incluso hielo. Esta forma de hacer espacios, que nace de saberes ancestrales y técnicas artesanales, se conoce como arquitectura vernácula.

En la región p’urhépecha de Michoacán, México, existe un sistema constructivo llamado Troje. Su interior es el lugar donde se duerme, mientras en la parte superior, o tapanco, se almacena la cosecha de maíz, a la que se accede por una escalera. Desarmable y nómada, la Troje se levanta sobre un basamento de piedras dentro de un solar, terreno que comparte con la cocina, el taller y el huerto, formando un pequeño y particular universo para cada familia.

Hacer eco de la arquitectura vernácula es reflexionar sobre nuestros orígenes mientras imaginamos colectivamente otras formas de habitar, conectadas íntimamente con los lugares donde vivimos.

Around the world, unique ways of building homes and shelters can be found, where inhabitants have made use of what their environment offers them—earth, stones, wood, and even ice. This way of creating spaces, rooted in ancestral knowledge and artisanal techniques, is known as vernacular architecture.

In the P’urhépecha region of Michoacán, Mexico, there is a construction system called Troje. Its interior serves as a sleeping space, while the upper part, or tapanco, is used to store the corn harvest, accessible by a staircase. Dismountable and nomadic, the Troje is built on a stone foundation within a solar—a plot of land it shares with the kitchen, workshop, and garden—forming a small yet distinctive universe for each family.

Echoing vernacular architecture means reflecting on our origins while collectively imagining other ways of inhabiting spaces, deeply connected to the places where we live.